Seguridad en el trabajo: una guía para proteger la salud de las personas en el trabajo
La salud y seguridad en el trabajo (SST) se trata muchas veces como una casilla para checar, algo que solo compete a los responsables de cumplimiento normativo o que se olvida en el trabajo del día a día. Sin embargo, esta forma de pensar conlleva un costo. Cada año, millones de personas sufren lesiones o enfermedades o, aún peor, porque su lugar de trabajo no prioriza su seguridad y bienestar.
En esencia, la seguridad en el trabajo –el trabajo por prevenir accidentes y lesiones– siempre ha sido la columna vertebral de la protección en el lugar de trabajo. No obstante, la SST ya no se trata solo cascos protectores y señales de advertencia. En la actualidad, se trata de salvaguardar la salud en todos los sentidos de la palabra. Nos obliga a abordar los problemas a largo plazo, tales como estrés, desgaste profesional, fatiga y exposición a químicos, con la misma urgencia con la que tratamos los resbalones, tropiezos y caídas.
Cuando las organizaciones integran la salud, la seguridad y el bienestar en su cultura, no están solo marcando una casilla: están protegiendo a su gente y construyendo al mismo tiempo una empresa más fuerte y resiliente. Por tanto, y con independencia de si su personal está en una obra, en una oficina o teletrabajando, la SST debería ser más que una tarea de cumplimiento normativo: debe ser la base de una organización saludable y exitosa.
Índice
¿Qué significa la SST hoy en día?
La SST consiste en crear una cultura en la que cualquier persona –ya sea un Director General, contratista o voluntario– pueda llevar a cabo sus obligaciones sin poner en riesgo su vida, salud o aptitud. Para lograrlo, se requiere un enfoque proactivo: identificar los peligros en el lugar de trabajo, comprender los riesgos e implementar medidas inteligentes y tangibles para prevenir lesiones y daños. Puede suponer el rediseño de una tarea para reducir tensiones, mejorar la calidad del aire o reconfigurar las cargas de trabajo para evitar el desgaste profesional.
Como se puede ver, va mucho más allá de los cascos y chalecos reflectantes. Cuando la seguridad de los trabajadores se convierte en una prioridad compartida, nuestra forma de trabajar se transforma. Con las directrices de seguridad adecuadas, los equipos se mantienen centrados, confiados e incluso disfrutan de su jornada de trabajo. Integrar la SST en la rutina diaria mediante evaluaciones de riesgos periódicas, conversaciones abiertas y consejos prácticos de seguridad en el trabajo ayuda a crear un lugar de trabajo en el que las personas se sienten protegidas, valoradas y empoderadas para dar lo mejor de sí mismas.
Peligros en el lugar de trabajo: conocer los riesgos
Cada lugar de trabajo tiene sus peligros; cuando estos no se gestionan, se convierten rápidamente en riesgos. Un peligro en el lugar de trabajo es cualquier fuente, situación o comportamiento que tenga el potencial de causar lesiones, enfermedades o daños a la salud física o mental de un trabajador.
Se presentan de muchas formas:
- Físicos: suelos resbaladizos, cables expuestos, ruidos intensos
- Químicos: sustancias tóxicas, materiales inflamables
- Biológicos: bacterias, virus, mohos
- Ergonómicos: mal diseño de las estaciones de trabajo, movimientos repetitivos
- Psicosociales: estrés, acoso o intimidación
Sin embargo, no todo peligro pone en riesgo a las personas. La diferencia se encuentra en cómo de bien se controlan. La aplicación de directrices de seguridad –tales como reemplazar las sustancias peligrosas por alternativas más seguras, instalar barreras, mejorar el diseño de las tareas o simplemente organizar el trabajo de manera más eficaz– puede contribuir en gran medida a la protección de la seguridad de los trabajadores.
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Cómo identificar peligros en el lugar de trabajo
El primer paso para crear un lugar de trabajo más seguro es saber a lo que nos enfrentamos. Entonces, ¿cómo puede identificar los peligros en el lugar de trabajo antes de que den lugar a lesiones o problemas de salud? Se comienza por algo bien simple: la observación. Recorra por cada zona en la que se trabaje y busque cualquier cosa que potencialmente pueda dañar a alguien o dar lugar a una situación peligrosa.
Entre las señales de alarma más comunes están:
- Cables sueltos o caídas desde gran altura sin protección
- Herramientas y equipo mal mantenidos
- Trabajo que se lleva a cabo en espacios reducidos o en altura
- Ruido excesivo, temperaturas extremas o mala iluminación
- Mala calidad del aire debido a polvo, humo o ventilación inadecuada
- Trabajadores visiblemente cansados, estresados o emocionalmente abrumados
Aun así, no se quede solo en lo que puede ver. Los informes de incidentes, evaluaciones de salud, datos de monitoreo de equipos e instrucciones de los fabricantes pueden revelar riesgos ocultos. Lo más importante de todo: hable con su equipo. Las personas que trabajan día sí y día también normalmente tienen la información más precisa sobre lo que puede salir mal.
Consejos de seguridad en el lugar de trabajo que marcan la diferencia
Detectar los peligros en el lugar de trabajo solo es el comienzo. Una vez identificado el riesgo, el siguiente paso es evaluar su gravedad. ¿Cuán probable es que provoque lesiones o problemas de salud? ¿Cuán grave podría ser el resultado? ¿A cuántas personas podría afectar?
Para gestionar los riesgos eficazmente, una de las directrices de seguridad es la jerarquía de controles, un método simple, pero poderoso que prioriza las soluciones basándose en su eficacia. Aunque suene muy técnico, en realidad no es más que el sentido común: comenzar con la forma más poderosa de eliminar un riesgo y continuar descendiendo en orden de prioridad.
Los cinco niveles de control son:
- Eliminación: eliminar el peligro por completo. Sin peligro, no hay riesgo.
- Sustitución: cambiar el artículo o proceso peligroso por otro más seguro.
- Controles técnicos: rediseñar el lugar de trabajo o el equipo para reducir la exposición.
- Controles administrativos: implementar políticas, procesos y capacitación periódica.
- Equipo de protección personal: utilizar indumentaria como cascos, máscaras o guantes –pero solo cuando otros controles no sean suficientes.
Con este enfoque, no solo se protege la salud de los trabajadores, sino que también se crean sistemas más inteligentes y seguros en toda su organización. Al aplicar estas buenas prácticas de forma coherente, las organizaciones pueden pasar de parches reactivos a una gestión proactiva de la seguridad a largo plazo.
Poner en práctica las directrices de seguridad
La seguridad de los trabajadores nunca se debería tratar como un complemento, sino como la clave de toda estrategia de una organización. Comienza en lo más alto, con líderes que abogan visiblemente por el bienestar físico y mental de sus equipos. Si la salud y la seguridad son temas recurrentes en el orden del día de las reuniones, el personal de rango superior responde a las preocupaciones en tiempo real y todos siguen las normas sin excepciones, se transmite un mensaje claro: las personas importan.
Para que este compromiso entre en acción, aquí le presentamos algunas de las directrices de seguridad esenciales que toda organización debería seguir:
- Defina claramente su política de SST y divúlguela por toda la organización. Esta política debe reflejar sus prioridades y mostrar a los empleados que se toma en serio su protección.
- Evalúe los riesgos en el lugar de trabajo en las etapas tempranas e involucre a su equipo en el proceso. Una perspectiva de primera línea le ayudará a detectar y abordar los riesgos antes de que crezcan.
- Implemente los controles correctos. Elimine los riesgos siempre que sea posible, adopte procesos más seguros y asegúrese de que los trabajadores tengan el equipo, el tiempo y el apoyo que necesitan para trabajar de manera segura.
- Brinde la capacitación a todo el equipo: también a quienes trabajan a media jornada, a distancia o en el turno de noche. Ayude a las personas a entender cómo protegerse y qué hacer en caso de emergencia.
- Fomente una comunicación abierta y bilateral creando un espacio seguro para que los trabajadores informen de los problemas. Las reuniones periódicas pueden ayudar a mantener un diálogo continuado sobre la salud y la seguridad.
- Involucre a la plantilla en las decisiones de SST. No espere a que se haya tomado la decisión: inclúyalos en el proceso desde el principio.
- Haga un seguimiento del desempeño mediante auditorías de seguridad, informes de cuasi accidente y retroalimentación para comprender qué cosas funcionan bien y cuáles se deben mejorar.
- Actualice sus sistemas periódicamente con las conclusiones de las auditorías, los datos de incidentes y la experiencia de primera línea.
Alinear estos esfuerzos con Normas Internacionales tales como ISO 45001 es clave para mejorar la salud y seguridad del personal y reducir los peligros en el lugar de trabajo. Esta estructura de SST reconocida mundialmente no solo apoya el cumplimiento normativo: también ayuda a integrar una cultura de mejora continua y empodera a los trabajadores a desempeñar un papel activo en la creación de lugares de trabajo más seguros y dinámicos.
Consejos de seguridad en el trabajo
Un lugar de trabajo seguro y saludable no solo se centra en las directrices de seguridad formales y los protocolos, sino que se refuerza en las prácticas y comportamientos diarios que construyen la confianza, demuestran interés y crean un ambiente en el que todo el mundo puede prosperar.
Como empleador, usted marca la pauta. La implementación de unos pocos consejos claros de seguridad en el lugar de trabajo puede contribuir significativamente a la seguridad y la productividad. Asegúrese de que toda la plantilla comprenda que la salud y la seguridad son responsabilidades colectivas. Cuidarse y cuidar de otros puede marcar una gran diferencia.
Fomente los comportamientos proactivos:
- Si alguien está levantando peso de manera inadecuada, bríndele orientación sobre técnicas más seguras.
- Aborde inmediatamente peligros tales como los vertidos y obstáculos, en lugar de pasarlos por alto.
- Contacte con compañeros que parezcan estresados, fatigados o abrumados, ya sea por tareas nuevas, fechas límite apuradas o desafíos personales.
Nunca suponga que otra persona se hará cargo. Si usted no puede resolver un problema de forma independiente, pida ayuda.
Involucrar a los trabajadores
Seamos realistas: nadie conoce mejor la rutina diaria que quienes están en la primera línea. Sus trabajadores son los ojos, oídos y, a veces, narices de su organización. Involucrarlos en la SST no es solo lo inteligente: es esencial. Pero, ¿cómo conseguir la colaboración de todos y todas?
Para promover la participación significativa:
- Cree un equipo de SST colaborativo: incluya a representantes de todos los niveles –gerentes, empleados y contratistas– para garantizar unas perspectivas diversas en los debates de seguridad.
- Simplifique la documentación de peligros: implemente herramientas fáciles de usar, cómo aplicaciones de celular o buzones de sugerencias para fomentar los informes anónimos de peligros en el lugar de trabajo y los riesgos por controlar.
- Rote las responsabilidades de seguridad: haga que su personal se turne en la labor de seguridad y promoverá la responsabilidad y una comprensión más profunda de los protocolos de seguridad.
- Brinde una capacitación integral: ofrezca sesiones de capacitación accesibles y periódicas adaptadas a diferentes roles y horarios; así, garantizará que toda la plantilla, incluido el personal en remoto y a media jornada, sepan cómo mantener un ambiente de trabajo seguro. Cuando explique los consejos de seguridad en el lugar de trabajo, utilice un lenguaje sencillo. El objetivo es que sea claro, directo y fácil de comprender por cualquier persona.
Recuerde: la seguridad de los trabajadores es un deporte de equipo. Al promover una cultura en el que todo el mundo se siente empoderado, no solo está reduciendo los riesgos en el lugar de trabajo: está construyendo un equipo más fuerte y conectado.
- ISO 45001:2018Sistemas de gestión de la seguridad y salud en el trabajo
Cómo la seguridad de los trabajadores construye el éxito empresarial
La inversión en SST es más que simplemente hacer lo correcto a nivel humano: es una estrategia empresarial que conduce a un éxito sostenible.
Aquí le mostramos cómo priorizar la seguridad de los trabajadores crea un valor tangible para los empleadores:
- Menores costos: la prevención de accidentes reduce las disrupciones, los gastos en salud y las primas de seguros.
- Cumplimiento normativo: mantenerse al tanto de unas regulaciones cambiantes evita sanciones y daños a la reputación.
- Mayor productividad: un lugar de trabajo enfocado en la salud en el trabajo, la seguridad y el bienestar del personal mejora la moral y conduce al máximo desempeño.
- Reducción del presentismo, el absentismo y la rotación: una plantilla sana está más comprometida y motivada y es más leal.
- Fortalecimiento de la reputación de la marca: demostrar el compromiso con la salud, la seguridad y el bienestar atrae y retiene los mayores talentos y construye la confianza de los clientes.
- Eficiencia operacional: los procesos más seguros conducen a la rentabilidad y el crecimiento duraderos.
Reinventar la seguridad para el lugar de trabajo moderno
El futuro de la SST ya está aquí. Las apps inteligentes, la tecnología ponible y los sensores de la IdC están transformando cómo detectamos y respondemos al peligro al enviar alertas en tiempo real para prevenir problemas de salud antes de que sucedan. La IA y el aprendizaje automático lo llevan un paso más allá: permiten a las organizaciones predecir los riesgos antes de que se agudicen, a la vez que la automatización y las innovaciones ergonómicas rediseñan los puestos de trabajo para proteger a la plantilla.
Sin embargo, el progreso conlleva sus propios desafíos. Desde la exposición a la radiación en la atención sanitaria hasta la fatiga mental en los roles hiperconectados, los peligros en el lugar de trabajo evolucionan rápidamente. Por ello, las evaluaciones de peligros, los controles de seguridad y la capacitación también deben evolucionar; lo que protegía al personal ayer podría no bastar el día de mañana.
Las organizaciones que prosperarán serán aquellas que se adapten a la situación e integren la seguridad de los trabajadores en cada proceso y traten la SST como una prioridad estratégica... y no como una casilla para checar. No en vano, en el mundo actual, proteger a su gente es proteger su empresa.